La ciudad y sus repartidores

La ciudad ha cambiado a lo largo de los años, muchos la siguen sufriendo y gozando, sobre todo aquellos que a diario recorren sus calles trabajando, repartidores que la caminan y la ruedan, de oriente a poniente, de sur a norte, del mercado al restaurante, del café al hogar.

¿Quién no ha requerido los servicios de un repartidor? De esos seres que en bicicleta, a pie o en vehículos adaptados a la necesidad de carga requerida, recorren las calles para llevar la mercancía ordenada por el cliente. En México, pero principalmente en la ciudad, podemos encontrar varios de ellos circulando por las calles, la gran mayoría representando un oficio surgido épocas atrás.

Repartidores de aplicación:

 

Repartidores de aplicaciones

Estos repartidores surgieron hace cuatro años, realizan los viajes que por medio de una aplicación se van solicitando. La app recibe los pedidos y el socio elige cuál aceptar. El proceso de ingreso es simple: bajas la aplicación, llenas un formulario, y después de una evaluación, determinan si puedes trabajar. Mientras más servicios realices, más ganas. Llevan los productos en una gran mochila que cargan a hombros, ya sea en bici o moto.

Repartidores de pan:

repartidores de pan

Muy lejos del clásico repartidor de pan con su canasta de mimbre sobre la cabeza, la evolución de este oficio ha sido sustancial: ahora se le puede ver en triciclos llevando el pan a los expendios o en venta directa al consumidor. El repartidor de pan que más se asemeja al clásico de los años 50, se le puede ver en el Centro Histórico repartiendo su pan en un canasto que llevan asido a la parte trasera de su bicicleta, en cajas o en grandes bolsas atadas a los costados de la bici.

Repartidores de periódico:

Repartidores de periódico

Es ya imposible de ver una bicicleta con la torre de periódicos atada a la parrilla trasera llevando las noticias de casa en casa. Esta forma de repartir ha dejado de emplearse, ahora las editoriales distribuyen sus periódicos en los expendios donde acude el vendedor a conseguirlo para exhibirlos en supuesto. Era un oficio bonito, con mucha magia, belleza y equilibrio.

Repartidores de mercado:

repartidores de mercado

Ayudados de una caja de plástico montada sobre la parrilla de la bici, estos repartidores transportan desde pequeñas cantidades de carne hasta una parte completa del animal, puede ser pollo, res o cerdo. Podemos encontrarlos en los alrededores de cualquier mercado, suelen llevar el producto a los restaurantes, locales de venta de comida y casas.

Repartidores de masa:

Repartidores de masa

Aguerridos y cargando siempre varios kilos en sus corceles de acero, este tipo de repartidores se caracteriza por llevar una gran mole de masa en la parrilla trasera de su bicicleta. De los molinos de nixtamal suelen llevar los pedidos a tortillerías, panaderías o sitios de venta de antojitos mexicanos. Muchos molinos suelen usar triciclos de carga para llevar una cantidad mayor de masa, pero sin lugar a dudas transportarla en una bicicleta es todo un reto de fuerza y equilibrio.

Repartidores de hielo:

Repartidores de hielo

Sin lugar a dudas este tipo de repartidores tiene un lugar aparte. Ya son pocos los que dedican su tiempo al oficio de la repartición de hielo. Además de realizarlo en una bicicleta que monta un side-car con una plataforma donde se coloca el bloque de hielo. En su recorrido van dejando la cantidad de hielo pedida por el cliente, para cortarlo se ayudan de un picahielo y lo toman con unas pinzas grandes. Una cosa curiosa de este oficio: es que si encuentran un local cerrado suelen dejar el producto en el suelo, a las puertas del local.

Estos son los repartidores que podemos ver circulando por las calles de la ciudad. Desempeñando oficios que se han resistido a desaparecer pues siguen siendo primordiales y de bajo costo para algunos sectores comerciales.

Nota recomendada:

Trabajadores del pedal

Cycle City Edición 57